Corantioquia ha formado más de 15000 niños y niñas como Guardianes de la Naturaleza

• Con éxito se llevó a cabo la apertura de un nuevo ciclo formativo que busca enseñar a más de 3000 niños a cuidar la naturaleza.

En la apertura de este programa, la directora general de Corantioquia, Liliana María Taborda González, nos cuenta sobre su importancia, los retos y lo nuevo que trae esta estrategia durante su administración.

¿Cuál es la importancia de esta estrategia?

Guardianes de la Naturaleza es la oportunidad de inculcar en los más pequeños el amor por el cuidado del ambiente, es increíble ver a los niños enseñando a sus padres a cuidar los animales, las plantas, un niño que aprende y adquiere amor por este tema será un adulto consciente de la necesidad de emprender acciones por el cuidado de la casa común, por eso queremos continuar con esta estrategia y fortalecerla.

Nos emociona ver que vamos en ascenso, para este periodo se han inscrito más de 150 grupos, que representan alrededor de 3000 niños que empiezan este camino de ser guardianes de la naturaleza. A través de esta iniciativa transformamos vidas y ellos son nuestros principales aliados, niños que habitan en el interior del territorio, en la ruralidad muchas veces lejana a nuestra realidad urbana, pero es ahí, donde ellos viven que está el centro de la biodiversidad y con ellos y por supuesto, con toda la comunidad la vamos a conservar.

¿A qué le apuesta Guardianes de la Naturaleza bajo la dirección de Liliana María Taborda?

A trascender las fronteras de nuestra jurisdicción, a contagiar a otras Corporaciones Autónomas para que incorporen este programa de educación ambiental que moviliza a toda la comunidad educativa, a formar a estos 3000 niños que finalmente se convierten en 3000 familias cuidando nuestro patrimonio natural y, a dejar dentro del PGAR un importante avance en el indicador de trabajo intergeneracional, es decir, que estos niños puedan continuar en el tiempo siendo jóvenes conectados por la vida y finalmente adultos con un alto grado de conciencia ambiental. A involucrar a más niños de las comunidades étnicas, con grupos de Guardianes Afrocolombianos e indígenas, que conocen del valor de la tierra.

¿Cuál es el valor diferenciador esta vez del programa Guardianes de la Naturaleza?

Con este proceso que vamos a iniciar pretendemos entregar más herramientas que les permitan ser sostenibles en el tiempo, es decir, que los docentes y los formadores sean autónomos en sus talleres y encuentros, por supuesto con nuestra asesoría pero que no se vean limitados por agenda, sino que puedan tener una dinámica propia de capacitaciones en temas de acuerdo con la realidad de cada territorio.

También pretendemos que los niños mayores de 14, que terminen su proceso como Guardianes se conviertan en jóvenes conectados por la vida, personas comprometidas con este ejercicio pero que Corantioquia los siga acompañando, respaldando, entregando recursos para que continúen con esta invaluable misión.

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¿Qué puede esperar un padre de familia que tenga como hijo a un guardián de la naturaleza?

Mis hijos, Violeta y Emilio son Guardianes de la Naturaleza y son mi ejemplo para seguir, los hijos de los funcionarios de Corantioquia son Guardianes, el ejemplo empieza en casa, es un honor decir que tenemos hijos conectados por la vida, uno pensaría que como están pequeños no le ponen atención a su entorno, pero no es así, son ellos con sus ocurrencias, sin temores, sin penas, los que nos enseñan y nos hacen reflexionar sobre la importancia de cuidar nuestra riqueza natural.

¿Cuál ha sido el mayor logro de este programa en sus más de 25 años?

Formar más de 15000 niños como Guardianes de la Naturaleza, llegar a las comunidades más apartadas, el 80% de los grupos inscritos están lejos de la centralidad del Valle de Aburrá, es un logro irrefutable el hecho de que los niños quieran seguir en formación en temas ambientales, tenemos por ejemplo chicos que se forman como ingenieros ambientales;  ver cómo se convierten en lideres y lideresas que alzan su voz para defender el ambiente, que con su ejercicio le apunten a procesos sostenibles desde la economía circular como es el caso de quienes hoy tienen proyectos de turismo de naturaleza y sin duda, el impacto más significativo es que son ellos quienes le enseñan a los adultos a cuidar, a proteger y a preservar.

¿En qué momento decide Liliana María Taborda, directora general de Corantioquia, convertirse en Guardiana de la Naturaleza?

Desde que nací, toda mi vida he considerado la importancia de la naturaleza, y ahora me pongo la camiseta de guardiana, comprometida con llegar a los territorios más apartados de nuestra jurisdicción con esperanza y gratitud por estar conectados por la vida.

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